jueves, 30 de enero de 2014

Llanto

Llorar. Por un montón de cosas contenidas, llorar de frustración, de tanto extrañar, de dolor, de decepción. Llorar; necesitaba hacerlo, necesitaba limpiarme el alma con la sal que cada lágrima tiene. Necesitaba llorar.
Necesitaba volver a ser una nena chiquita llorando porque no le dieron un abrazo, porque no se animó a pedirlo, ni a darlo a quien sabia que lo necesitaba. Necesitaba llorar porque quiero seguir durmiendo con la tranquilidad de siempre, sabiendo que mamá está a unos metros de distancia.Necesitaba llorar porque hay gente a la que aún le tengo terror, necesitaba llorar.
Lloré. Lloro. Y pienso seguir llorando, porque hay mil cosas que quiero decir y el mundo no quiere escuchar, porque estoy muerta de miedo, al mundo, a la distancia, a la soledad, a alguna gente, a defraudarme, a no servir, muero de miedo a perder lo que tengo.
Y simplemente necesitaba algo de humedad en el alma, así tal vez vuelva a florecer como hace un tiempo.

                                                     -.-

Y si todo fuera más fácil,
      si no rebalsara mi alma de emociones,
si no me persiguieran los fantasmas del pasado,
                     si la distancia se esfumara de golpe,
si tuviera más coraje, tal vez, si fuera fuerte...

No habría más drama, dolor, tristezas o miedo.
      No sería yo tampoco,
parándome de frente,
secándome las lágrimas
      e intentando una nueva gambeta a la vida.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Aquí te dejo la Sortija. Subite y da otra vuelta...